La biogénesis es el principio científico que sostiene que la vida proviene únicamente de vida preexistente. En otras palabras, según la biogénesis, los seres vivos se originan a partir de otros seres vivos y no surgen de manera espontánea a partir de materia inanimada.
Este principio contradice la antigua idea de la «generación espontánea» (la cual es la base de la teoría de la evolución de las especies), que sostenía que organismos complejos podían surgir directamente de la materia no viva.
La biogénesis es un principio fundamental en la biología y es aceptada universalmente en la comunidad científica. Está respaldada por una amplia variedad de observaciones y experimentos que han demostrado de manera consistente que la vida proviene de vida preexistente. Este principio también se alinea con las nociones bíblicas expresadas en el relato de la creación en Génesis, donde se dice que cada ser vivo fue creado según su género y especie.
Los estudios profundos de Francesco Redi (1688) y Lazarro Spallanzani (1799) en Italia, Louis Pasteur (1860) en Francia, y Rudolph Virchow (1858) en Alemania desaprobaron la generación espontánea. La refutación de la generación espontánea fue un avance significativo en la historia de la biología.
El experimento de Pasteur involucró la creación de una vasija con cuello de cisne, diseñado de tal manera que permitía el paso del aire pero evitaba que partículas microscópicas alcanzaran el caldo de cultivo dentro de la vasija. Pasteur demostró que, a pesar de que el aire podía ingresar a la vasija, no se desarrollaban organismos vivos en el caldo de cultivo a menos que las partículas vivas estuvieran presentes en el aire que ingresaba. Este experimento proporcionó evidencia concluyente en apoyo de la biogénesis y refutó la idea de la generación espontánea.
El relato de la Creación en el primer capítulo de la Biblia usa repetidamente las expresiones “según su género” y “según su especie” con referencia a la vida (1:11-12, 21, 24-25). Aunque alguien que lee superficialmente Génesis 1 puede considerar estas expresiones como repeticiones pesadas, lo cierto es que éstas enfatizan un hecho científico irrefutable: toda vida surge de la vida preexistente, y produce según su género. Pero ¿cómo pudo Moisés, quien escribió el Pentateuco algo de 3,000 años antes de los estudios de estos científicos, establecer este hecho con tal precisión asombrosa?
Gracias por compartir información tan importante, el Señor les bendiga grandemente